Este dulce néctar es consumido desde siempre y a lo largo de los siglos se le han atribuido cada vez más bondades. Dorada, dulce y viscosa, existen alrededor de 320 variedades de distintos orígenes.
Existe desde el momento en el que las abejas y las flores aparecieron en la Tierra, no se sabe con exactitud cómo fue descubierta pero las primeras evidencias apuntan al 6000 a.C. en pinturas rupestres de Mesolítico.
¿Sabías que su sabor, color y aroma dependen de las distintas fuentes de flores y plantas que las abejas visiten? Y gracias a este noble labor, no solo sacamos provecho de la miel, también de la polinización que nos beneficia a todos por la preservación del hábitat natural.
Si bien no es novedad que la miel es muy saludable, muchos desconocen la cantidad de beneficios que realmente brinda a la salud.
Además de alegrarnos el corazón con su dulce sabor, también sirve para tratar, curar y prevenir afecciones, ya que con ella se realizan recetas y bebidas deliciosas, además de ser el mejor reemplazo del azúcar.
Posee flavonoides, fenoles, enzimas y ácidos orgánicos que la vuelven un potente antioxidante. Es antibacteriana y cicatrizante, lo cual ayuda a regenerar heridas en la piel como cortes, quemaduras y acné.
Ayuda a regular los niveles de colesterol en sangre elevando las lipoproteínas de alta densidad (colesterol bueno) y baja los LDL conocido como malo, gracias a esto resulta un protector cardiovascular además de activar el metabolismo.
Comúnmente se utiliza mucho para aliviar resfriados, dolores de garganta y la tos por que despeja la mucosidad en las vías respiratorias y da una sensación de alivio en la faringe y laringe. Fortalece el sistema inmune por su aporte de energía de fácil absorción, estimula la formación de anticuerpos y glóbulos rojos.
Varios estudios científicos comprobaron que la miel tiene un efecto antiinflamatorio por sus nanopartículas (proteína NLRP3), e históricamente se sabe que se usaba como ungüento para masajear zonas del cuerpo. Es recomendado para tratamientos de dolor abdominal y síndrome premenstrual, procesos alérgicos e hinchazón muscular.
Otra bondad sumamente importante a destacar es que ayuda a conciliar el sueño y a tener un descanso reparador, ya que su consumo estimula la producción de la melatonina, hormona responsable de regular el sueño.
Son muchos más los beneficios de este néctar milagroso, y actualmente se siguen investigando sus propiedades para el beneficio de la salud, lo cierto es que cuanto más orgánica sea la miel más provechoso será su consumo.
Información: lanacion.com.py
