Un fotógrafo captura a una abeja expulsando ácido úrico en plena acción.
El fotógrafo aficionado Mark Parrott logró algo extraordinario: capturar el preciso instante en el que una abeja expulsaba ácido úrico, el equivalente a la orina en los humanos.
«Me quedé muy sorprendido y no podía creer lo que estaba viendo».
Es muy difícil conseguir primeros planos sin trípode, pero este salió muy bien», declaró al Grimsby Telegraph.
Aunque las abejas no orinan como los mamíferos, sí eliminan desechos a través del ácido úrico, que se forma en sus túbulos de Malpighi (el equivalente a los riñones en insectos) al mezclarse potasio con dióxido de carbono.
La cantidad expulsada es ínfima, lo que hace que este fenómeno sea casi imposible de observar. ¡Una verdadera rareza de la naturaleza.