El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), a través del Museo Nacional de la Estampa (Munae), abren al público la exposición sobre uno de los artistas mexicanos más

Por su parte, la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, resaltó que esta exposición dedicada a la obra gráfica de Francisco Toledo es muy significativa para todo el arte en México y la memoria del maestro y a la que se suman personas ejemplares del coleccionismo para compartirlo y preservarlo.

En esta muestra “se desdobla el corazón para que quepa la emoción, tanta profundidad, tantos sentidos, tanta historia individual y colectiva. De un artista que transitó por las diferentes expresiones: pintura, escultura, lo textil y tapices”.

En tanto, el director del Munae, Emilio Payán, dijo que Toledo fue como un chamán, como un mago que todo lo convertía en arte. Una semilla, un puñado de tierra, un trozo de madera, un mecate, papel, la naturaleza y hasta el aire con sus papalotes; el amor, la amistad, la lucha por la igualdad, el derecho a la educación y el derecho a la cultura.

La influencia de Toledo en el arte mexicano en la segunda mitad del siglo XX es tan relevante que quizá no sea demasiado arriesgado afirmar que de alguna manera se puede equiparar con la herencia de los forjadores de nuestra identidad artística durante las primeras décadas, y agregó: “No podemos concebir el México actual sin la obra de Francisco Toledo”

Es así como esta muestra está integrada por más de 180 obras que, en su mayoría, son grabados y estampas realizados entre los años 1960 y 2018 con las técnicas de aguafuerte, aguatinta, punta seca, azúcar, mezzotinta, litografía, mixografía y xilografía. También se observarán algunos ejemplos de acuarela, gouaches y cerámica.

Cada quien con su Toledo. Obra gráfica, 1960-2018” es un panorama, un esbozo del conjunto de la obra gráfica de Francisco Toledo, un artista que exploró su propia diversidad a través de autorretratos, así como de la experimentación con diversas técnicas, además de haber sido una persona que defendió numerosas causas políticas y sociales.

Esta muestra representa también un punto de partida para que nuevas generaciones conozcan a este multifacético artista y para el público que ha seguido su trayectoria es una oportunidad para rememorarlo y revisitar algunas de sus obras.

Acerca del título, su curadora, la historiadora Ana Carolina Abad López señaló: “Durante el proceso de investigación y curaduría nos dimos cuenta de que cada persona tiene su propia versión de quién fue Francisco Toledo. La invitación implícita en el título es que, al recorrer la exposición, cada visitante construya su propia imagen o versión de Toledo: el grabador, el activista, el artista, la persona”.

Para el 2024 el Museo del Palacio de Bellas Artes prepara una magna exposición que mostrará el vínculo entre las artes gráficas y las narrativas históricas y literarias, muestra que contará con piezas del emblemático artista zapoteco.